domingo, 10 de junio de 2012

El violinista


 
(Sorprende a tus sentidos escuchando la música mientras lees el relato)

Frederic Chopin - Nocturne Op.9 Nº2



 

Un color especial comenzaba a fundirse con los verdes del jardín y del mar. Una ligera brisa impregnaba el ambiente del inconfundible olor a jazmín que cada tarde nos acompañaba mientras que desde nuestra privilegiada situación, veíamos en el horizonte cómo los pesqueros regresaban de su faena.
Cuando vi que su barco se acercaba, mi corazón se agitó y comencé a inquietarme ... Sabía que a Jacques no le molestaban mis vespertinos paseos y que podría irme sin que él sospechase nada, pero no podía detener mi imaginación y el posible encuentro apenas me dejaba respirar. 

Desde hacía tres semanas, todas las tardes caminaba con cierta impaciencia hacia el puerto. Comprobaba que el velero de Philippe ya estaba amarrado al final del muelle. Aceleraba el paso cuando percibía ese sonido que nublaba mi razón, que llegaba a mi alma como un intenso abrazo … su violín parecía llamarme en cada movimiento. Me acercaba y al percatarse de mi presencia sus ojos se fundían con los míos en una armonía increíblemente perfecta. Acababa la pieza y nos quedábamos mirándonos en silencio. – ¿Subes a bordo? – preguntaba tendiéndome la mano. Yo aceptaba y sujetándome fuerte con ambos brazos me ayudaba a embarcar. Él seguía tocando y yo mientras soñaba con un beso que nunca llegaba. En la ciudad nadie conocia a Philippe y su pasado era un misterio para mí. Solo sabía de él que vivía en su barco, tocaba el violín y navegaba. Me hablaba de sus viajes y me relataba historias sobre los grandes músicos. Yo podía pasar horas escuchándole …

Dejé la sombrilla, me retoqué el peinado, pellizqué mis mejillas y mordisqueé mis labios … me sentía bella y feliz. – ¿Ya te vas, querida? Disfruta de tu paseo – me dijo Jacques regalándome una sonrisa. – Gracias, llegaré para la cena – contesté.

Cómo cada día, comenzó mi impaciente camino hacia el puerto, deseando que nuestras miradas se volviesen a encontrar mientras sonaba esa mágica melodía que me transportaba a lugares desconocidos para mí. Cuando me iba acercando al muelle, comprobé desilusionada que su embarcación no estaba. No podía ser, lo avisté desde el mirador hacía más de una hora. Comencé a preocuparme y pregunté a algunos pescadores que recogían sus redes, pero nadie supo contestarme. Apesadumbrada volví a casa. No quería que nadie leyera en mi cara el desasosiego y salí directamente a la terraza, para intentar recordar las agradables sensaciones de unas horas antes, cuando junto a Jacques disfrutaba de esos bellos colores y olores del atardecer. Entonces divisé como el velero de Philippe se alejaba … se marchaba y no podía decirle adiós. Sentí un profundo dolor ante la posibilidad de que se fuera para no volver. No quería creerlo … él regresaría para darme ese beso tantas veces imaginado. Alguien me sorprendió por detrás con un tierno y largo abrazo. Me giré y ahí estaba Jacques, y esa dulce mirada con la que siempre me había seducido. Tomó mi cabeza entre sus grandes manos y me besó. – Te he echado de menos esta tarde, mi vida – me susurró. Reconfortada con su cariño le devolví el beso y con un gesto le invité a que entrásemos en casa. Miré hacia atrás buscando en la lejanía a quien me había hecho soñar esos días y a quien con toda seguridad jamás olvidaría, pero la noche había caído ya y el mar estaba salpicado por pequeñas luces de los barcos que salían a pescar y podía ser cualquiera de ellos. Creí escuchar un violín … – ¿Vamos, cariño? – Dijo Jacques  – Entré en casa y sentí que ese era mi lugar.






10 comentarios:

  1. La espera ha valido la pena. Una historia preciosa, te mantiene en vilo de principio a fin. Enhorabuena, ha sido todo un acierto combinarla con música y con un cuadro. Es lo que yo llamo un relato en tres dimensiones. Es increíble como dominas todos los géneros del relato. Espero que pronto podamos tener todos estos relatos recopilados en un libro. Sigue adelante este camino tendrá su recompensa seguro.

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    1. Un abrazo a la creadora del término "relato en tres dimensiones" ... ya sabes que siempre me animas y tus comentarios me invitan a seguir escribiendo ... si es que eres lo más! ;P

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  2. Que bonitoooo!!!!! Cada vez lo haces mejor. Me encanta como transmites los sentimientos. Mi corazón también palpitaba con el de ella, y me ha recordado mis años de mocedad recién enamorada....

    Muchas gracias por hacer especial cada dia con tus relatos.

    Astarté

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  3. Qué bonito ¡ Philipe o Jacques? El enamoramiento del principio en plan montaña rusa cuando todo es novedoso o el amor tranquilo que llega con los años...? Aiss, si se pudiera tener todo ...

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  4. Es bueno tener un amor tranquilo, sereno, con la experiencia de los años compartidos, pero ese amor robado a tu propio destino, ese amor prohibido, a escondidas del mundo que que rodea, hace que a veces te sientas viva, aunque al final se vuelva al origen. Que bonito relato Rosa,Lo has descrito muy bien, cada dia me sorprender mas y yo seguiré leyendote!!

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  5. Rosa ,me encanta, he pasado un rato genial leyendo y escuchando una pieza tan bien escogida, sigue dandonos estos ratitos, gracias.

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  6. Rosa es una historia preciosa! y ademas con una gran eleccion musical, es u placer leerte :))

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    1. Leer tu comentario, sí que es un gran placer para mí ... Gracias Rosa!

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  7. ¡Emociones a flor de piel!!!

    Cuando leí este relato por primera vez no me atreví a comentar, un escalofrío recorrió mi cuerpo. Esa música, esa detallada descripción que te hace ver a los protagonistas delante tuyo y que deja volar la imaginación del lector.

    En el camino de la vida muchas personas se enfrentan a decisiones así... El amor tranquilo que se ha ido cultivando año tras año y que hay que seguir regando para que no se torne monótono. Y ese amor fresco que florece sin ser percibido y que nos remonta a tiempos de nuestra juventud, amor a veces real, a veces imaginario que nos hace soñar.
    ¿Mente versus corazón? ¿Pasión frente cariño? ¿Sueños contra realidad?

    Excelente relato del que se puede sacar mucho jugo.

    Enhorabuena amiga!!!!
    Ya ves que he vuelto con fuerzas y seguiré comentando y apoyando todo lo que escribas. Un beso enorme!

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  8. Si digo que me ha erizado la piel ya quedo de pesado, de repetitivo...

    Pero si te digo que si cierro los ojos soy capaz de sentir la hierba cosquilleando mis pies, el olor a jazmin rondando sobre mí y el leve pero placentero sonido de un violín casi susurrando mi oido sinónimo de sentimientos de esos que estallan dentro...

    La cosa cambia verdad...

    una maravilla señorita Fuertes!
    una maravilla...

    Muaaaaaa!

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